El 25 de noviembre es el día en el que a nivel mundial se visibiliza que existe un sistema que discrimina a más de la mitad de la población mundial.
Esta visibilización ha sido llevada a cabo por mujeres pensadoras y los movimientos feministas organizados desde hace más de 300 años y que tras siglos de activismo, reivindicaciones, manfiestaciones…han ido poco a poco incorporándose a la vida pública.
Cuando no existe un posicionamiento ideológico claro con acciones que lo refrenden ni un compromiso real, no se asumen responsabilidades desde los ámbitos que les competen, ni se dota de presupuesto suficiente a las políticas de estado, se niega que exista esta desigualdad.
La superficialidad de su tratamiento pone en evidencia que no se ataca a la raíz del problema porque no es considerado una prioridad ya que no se toma un posicionamiento claro, a veces elegido y otra veces ignorado, porque sirve para el mantenimiento de un estatus quo.
Es por ello que el uso de las distintas violencias hacia las mujeres no es más que un mero instrumento que quiere mantenernos en una posición inferior, aprovechándose de nuestros trabajos y de nuestros cuerpos, invisibilizando nuestra aportación en esta sociedad.
Desde Kódigo Malva queremos recordar que contra las injusticias sociales no se trabaja con acciones puntuales ni un día señalado, sino incorporando los feminismos, como dijo Simone de Beauvoir, que son una manera de vivir individualmente y de luchar colectivamente.