Aprovechando las enormes sinergias creadas en Chile por los movimientos sociales y particularmente por el movimiento feminista de cara al reto de enfrentar un periodo constituyente en el país , queríamos celebrar con ellas y para la película , nuestra compa Miji propuso Llueve sobre Santiago.
Como no damos puntá sin hilo, invitamos a nuestra querida amiga Barbara, chilena, gaditana, bailaora y residente en Graná, a que entrase en nuestro debate a través de Zoom.
La película es una coproducción Franco-Bulgara de 1975, donde con un estilo documental se muestran los hechos ocurridos durante la elección de Allende como presidente de la república y el posterior asesinato y golpe de estado tres años después.
Comentamos que algunas somos de una generación donde se vivían las dictaduras y golpes de estado en América latina con gran preocupación porque acabábamos de salir de una dictadura y dónde desde la izquierda se reivindicaba mucho y los partidos (psoe y el pc) eran otra cosa. Existió un acercamiento de esa lucha transatlántica y muchas de las que estamos aquí hoy las vivimos en primera persona, sobre todo a través de la música y los movimientos sociales.
La peli nos lleva a un conjunto de relatos personales que conforman una realidad subjetiva y diversa.
Constatamos que estamos seguras que USA estaba detrás de todos los golpes de estado en Centro y Sudamerica, practicando un neocolonialismo para imponer el capitalismo más feroz. Y a la vez, mantener la tensión de la guerra fría ampliando el Muro de Berlin a los Andes.
El golpe de Pinochet estuvo silenciado en España institucionalmente hasta los años 90.
Otras compañeras se han sentido interpeladas por el recuerdo tremendo del intento golpe de estado en España de 1982.
Las hay que dicen que no eran entonces ni proyectos, pero que conocer las historias nos permiten conocer y anticipar la realidad.
La perspectiva de la película invisibiliza muchísimo a las mujeres, porque así lo es el marxismo (marxchistas). Comentamos que ha sido bastante “peculiar” ver una película ambientada en Chile doblada al castellano.
En este punto Barbara nos comenta lo que la película le ha traído a la cabeza, como que le resulta muy interesante el relato contado desde Europa, con otras voces.
Tendremos que seguir conscientemente teniendo en cuenta la Banalización del mal (Hannah Arendt) para estar alertas y no repetir las historias.
Nos habla de que la revuelta social actual recoge muchos malestares por toda la impunidad de la que han gozado durante muchos años posteriores a la caída de la dictadura, sobre todo de los militares.
De que el movimiento feminista comienza a tomar visiblemente relevancia a partir del 2018 por los acosos sexuales en las universidades.
Así como que el proceso constituyente ha supuesto un nexo para diversos movimientos; pero casi siempre impulsado por las feministas de base y tendiendo puentes. Este proceso también ha supuesto una reparación con el pueblo indígena, que siempre ha sufrido discriminación.
Bárbara destaca la represión político sexual que han vivido, sobre todo por la herencia que mantienen desde las instituciones.
En los contextos actuales, cuanta sangre ha corrido por esas calles que siguen siendo el centro neurálgico de las protestas, como sigue el enfrentamiento de clases…porque el modelo económico instalado ha sido también un modelo cultural. La estrategia de hacer sufrir a la clase media para colocarse en el poder a través del individualismo, de la venta de “si quieres puedes”, la meritocracia… es el discurso cultural, que lo mejor es lo privado.
Aquí comparamos un poco esa alegría de las protestas sociales en Chile con la nostalgia de lo que fue el 15M.
Al ver la película parece que estamos viviendo lo mismo porque infravaloramos el “poder” de la ultraderecha.
Tendremos que seguir conscientemente teniendo en cuenta la Banalización del mal (Hannah Arendt), para estar alertas y no repetir las historias.
Quedamos encantadas y agradecidas a Barbara que ahora desde su entusiasmo por las constituyentes y anteriormente por el dolor de tanta injusticia, por compartir un trocito de su pueblo y de sus mujeres con todas nosotras .
Eso si, terminamos con abrazos virtuales y levantando puños feministas con la música de fondo de Qilapayum.